En cuanto a nutrición, ambos contienen un valor energético (kcal) similar la diferencia viene en el contenido de agua en la sandía con 92%, 7.5% carbohidratos, de los cuales el 6.2% son azúcares y un 0.8% es fibra dietética (Leskovar et al 2004, Bruton et al 2009)
Vitamina C: El melón tiene cantidades mayores (200g/73.5mg vs 16.2mg para la sandía). Esto probablemente explica la diferencia del color (el melón es más naranja). Como ustedes ya saben, la vitamina C es un antioxidante y juega un papel en la síntesis de catecolaminas y reparación de tejidos en todas las partes del cuerpo (Maughan 1999)
Betacaroteno (Vitamina A): El melón es más alto (200g/6,764UI vs 1,138 UI para la sandía) por lo tanto beneficioso para apoyar el sistema inmunológico, mantenimiento de la piel, las células mucosas y con la salud de nuestros dientes.
Potasio: El melón es más alto que la sandía (534mg vs 224mg respectivamente). ¿Qué es el potasio?, el potasio es un mineral importante que actúa como un electrolito y juega un papel crucial en la regulación del equilibrio de fluidos, señales nerviosas & contracciones musculares (Haddy et al 2006, Aaron & Sanders 2013)
Licopeno: es un carotenoide (Mutanen y Pajari et al. 2011) un potente antioxidante caracterizado por su distintivo color rojo en frutas y verduras con beneficios para luchar contra el estrés oxidativo (Choksi & Joshi 2007). Aquí la sandía es más alta que el melón con 14.40mg-4.60mg/200g (Chaoensiri et al 2009, Artes-Henandez et al 2010).