Las “dietas” son habitualmente usadas para bajar de peso (disminuir las tan conocidas “llantitas”) o para ayudar a tener un cuerpo mucho más definido y con buena masa muscular en conjunto con ejercicio constante, entre muchas otras.
Sin embargo, debido a la facilidad con la que hoy en día podemos acceder a cientos de recomendaciones sobre qué dietas seguir, (ya sea en internet o redes sociales) muchas veces se encuentran dietas basadas en experiencias y no en evidencia científica, poniendo en riesgo a tu cuerpo y al de todas las personas que las siguen por parecer “llamativas o eficientes” pero que desde un aspecto de nutrición son gravemente dañinas para tu cuerpo y metabolismo en general, generando consecuencias en tu cuerpo más allá que solo ayudarte a “bajar de peso”.
Ahora, algo muy importante que debemos recordar es que el concepto de DIETA se refiere a los alimentos que son ingeridos en tu día a día y no como mucha gente piensa, que una dieta forzosamente es para adelgazar, por lo tanto, puedes tener una dieta bien o mal planeada, puede ser poco saludable, equilibrada, alta en proteínas, etc., es por ello que siempre es recomendable acudir con expertos y profesionales.
Hoy en día existe infinidad de dietas, sin embargo, una de las que más han destacado en los últimos años es la dieta keto o cetogénica debido no sólo a que ayuda de manera eficiente con la pérdida de peso sino también por la diversa cantidad de ventajas que posee, tales como:
Ayuda a tratar los síntomas de la epilepsia
Puede ser efectiva en el control de la Diabetes Mellitus tipo II
Tiene beneficios cardiovasculares
Provoca que la gente se llene más rápido (por lo que come menos)
Incrementa los niveles de colesterol HDL (colesterol “bueno”)
Induce a la reducción de triglicéridos en la sangre (por lo que se le atribuyen efectos cardioprotectores)
Tiene propiedades neuroprotectoras
Tiene efectos anticancerígenos
Ayuda contra trastornos neurológicos y psiquiátricos
Pero ¿por qué puede ser tan eficiente esta dieta?
Para empezar, algo que debes conocer es que nuestro metabolismo de manera natural actúa por medio de algo conocido como glucolisis (o glicolisis) que consiste básicamente en la obtención de energía a partir de glucosa, que es el azúcar presente en diversa cantidad de alimentos y que se encuentra principalmente en forma de carbohidratos, siendo la manera habitual en la que nuestro cuerpo obtiene energía.
La dieta cetogénica por otro lado, es una dieta basada estrictamente en un bajo consumo de carbohidratos y rica en grasas saludables. Esto provoca que el cuerpo entre a un estado similar al que se tiene en ayuno.
Cuando estamos en ayuno debido a que no hay suficientes carbohidratos para ser usados en la generación de energía, el cuerpo entra en cetosis lo que provoca que se ocupen las reservas de grasa que se encuentran en nuestro cuerpo a través de algo conocido como beta-oxidación lo que da lugar a la formación de cuerpos cetónicos, que al igual que la glucosa son moléculas que pueden ser utilizadas por el cuerpo para generar energía, solo que estás la generan a partir de las grasas. Es decir, la dieta cetogénica simula los efectos que tiene el ayuno en nuestro cuerpo, pero sin dejar de comer.
Este proceso es mucho más lento que el habitual (glucolisis) sin embargo es por el cual se consigue pérdida tanto de peso como de grasa.
El posible efecto anticancerígeno que se le ha atribuido a la dieta cetogénica puede deberse a que el metabolismo energético de las células cancerosas depende de una de las variantes de la glucolisis, por lo que al haber menos niveles de azúcar en la sangre podría inhibirse el crecimiento de estas células. Seguir esta dieta como apoyo adicional al tratamiento médico debe ser analizado en cada caso particular.
Además, se sabe que esta dieta mejora el metabolismo de la glucosa al reducir los niveles de esta en la sangre, en conjunto con los niveles de insulina, por lo que en la actualidad muchos especialistas consideran esta dieta como una opción que refuerce el tratamiento de diabetes mellitus tipo II.
A pesar de todo esto, debido a que es una dieta que restringe casi en su totalidad a los carbohidratos, limitando así grupos alimenticios tan importantes como frutas y cereales, generando así una importante deficiencia de nutrientes, por lo que suplementarte adecuadamente durante el periodo en el que la lleves será la mejor opción.
¡OJO! A pesar de todo esto, no es recomendada para todo el mundo, como mujeres embarazadas o en personas con algún tipo de enfermedad hepática o renal. Queremos recordarte nuevamente: siempre es recomendable buscar la asesoría de un profesional de la salud y la nutrición, tengas o no estas condiciones.
Lo importante es que una vez que hayas terminado esta o cualquier dieta, si está diseñada para un periodo determinado, busques mantener una alimentación más balanceada donde niveles tus niveles de carbohidratos y otros nutrientes, junto con actividad física constante, y des continuidad a tus nuevos hábitos alimenticios.
En Vitary encontraras diversos suplementos con las mejores certificaciones de calidad, así como aval de especialistas en salud y deporte a nivel mundial.
· Cellsentials: Un excelente suplemento que cuenta con la poderosa Tecnología Incelligence, con una equilibrada mezcla de nutrientes específicos que ayudarán a que tus células sean más adaptables debido a que mejoran la señalización celular entre ellas.
· Proflavanol® C100: Debido a su alta concentración de vitamina C, extracto de uva de la más alta calidad (resveratrol) y sus antioxidantes, ayudará directamente a tu sistema inmunológico, además de esto, ayudará al cuidado de tu piel, salud cardiovascular así como protección antioxidante.
· CoQuinone 30: Contiene a la coenzima-Q10 producida microbiológicamente por fermentación y posteriormente purificada, en conjunto con ácido alfa lipoico para lograr una excelente absorción de esta coenzima en tus células, dándoles así, la protección y energía que tanto mereces.
Referencias:
*Evans M. (2018). Keto diets: good, bad or ugly?. J Physiol. 596(19):4561. doi:10.1113/JP276703
*McSwiney FT, Doyle L, Plews DJ, Zinn C. (2019). Impact Of Ketogenic Diet On Athletes: Current Insights. Open Access J Sports Med. 10:171-183. doi:10.2147/OAJSM.S180409
* Covarrubias G., P., Aburto G., M., Sámano O., L.F. (2013). Dietas cetogénicas en el tratamiento del sobrepeso y la obesidad. Nutrición Clínica y Dietética Hospitalaria. 33(2): 98-111. Doi: 10.12873/332cetogenicas
*Harvard Health Letter. (2019). Should you try the keto diet?. Harvard Health Publishing. Harvard Medical School. Recuperado de: https://www.health.harvard.edu/staying-healthy/should-you-try-the-keto-diet
*Mawer R. (2018). Dieta cetogénica: Una guía detallada para principiantes sobre la dieta cetogénica. Healthline. Recuperado de: https://www.healthline.com/health/es/dieta-cetogenica#diabetes